Nuestras pequeñas amigas nos han dado más de una vez un susto y eso que ninguna de las dos ha cumplido aún un año. La más pupas con diferencia ha sido Gordi. Nuestra cobayita más divina llego a casa como ya sabeis con una infestación de ácaros que no descubrimos hasta al día siguiente. Por suerte, con un tratamiento sencillo de curas y antiparasitarios en cosa de un mes estaba completamente bien.
Pero la cosa no quedo alli: el primer fin de semana de Gordi en casa, el sábado por la mañana cuando le estaba haciendo las curas me di cuenta de que tenía un poco de sangre en el culito y en las caquitas. Dios mio, panic moment... Nos fuímos corriendo al veterinario de exóticos pensando que nuestra aventura con las cobayitas ya llegaba a su fin. (Para que lo sepais si no habeis tenido cobayas las diarreas hemorrágicas es de lo peor que pueden tener y casi seguro conducen a la muerte. Además, por una cuestión de supervivencia estos animales no dan muestras de debilidad aunque estén enfermas hasta que ya están en las últimas, así que tampoco te puedes fiar de verla bien). Le hicieron varias pruebas (y ninguna le gustó, os informo) y finalmente y por suerte todo quedo en un susto. Por si acaso le dimos un antiparasitario estomacal y a casa.
Choco por su parte también llego un poco malita con una infección en los ojos que hacía que pareciera que los tenía muy muy pequeñitos. Con 2-3 dias de tratamiento se le fué, pero a las 2 semanas desarrollo una infección secundaria en el morrete (se le caía el pelo y se le hacían pequeñas calvas alrededor de la boca) que por suerte (otra vez) se fue con unas curas con salino.
Gordi aún nos deparaba una sorpresa más, está más complicada, pues los síntomas eran increíblemente sutiles: mal humor, agitar la cabeza siempre que le tocara el morro y una manera de comer muy particular moviendo ritmicamente la cabeza hacia una lado, como si tuviera torticulis o algo parecido. Fráncamente, sin los cursos de etología de la facultad, igual no me habría dado ni cuenta. Agarraos: la pobre tenía otitis!!! Ha tenido dos veces, no sabemos cómo ni porqué pero hace ya 4 meses que no tiene síntomas.
Cuando se le pasó el dolor definitivamente se le notó muchísimo un cambio de actitud, mucho más cariñosa y menos rabietas. Para que luego digan que los animalitos no tienen sentimientos y no lo pasan mal...
Aquí la teneis en una merecida siesta...
Moraleja: si vas a tener un animalito en casa tienes que estar atento a su salud en todo momento porque ellos no saben hablar para decirte "oye, que me duele aquí"
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En eso de no mostrar síntomas hasta que están muy mal son igual que los gatos.
ResponderEliminarMe alegro de que todo quedara en susto.
Qué suerte tienen de estar con unos expertos como vosotros!
Feliz domingo!
Hola. Adquiri 2 cobayitas con ácaros hasta una semana después no vimos las costras y lo lleve veterinario que le inyecto invertimec y 3 días después siguen empeorando tienen calvas en donde las costras. Yo les puse betadine. Y el viernes las vuelven a inyectar pero no estoy tranquila. Que mas puedo hacer?? He leído sobre bañar cada semana y unas pipetas. Tb poner una pomada de vaselina con azufre. Por favor solo las tengo 2 semanas y quiero disfrutar de ellas años. Que me aconsejáis. Gracias
ResponderEliminarLo mejor que te puedo aconsejar es que acudas a otro veterinario si no estás tranquila con el que tienes. Otra cosa sería contraproducente, ya que no soy veterinaria ni he visto al animal. Suerte!
EliminarMi cobayita tiene otitis que puedo hace? Ayudadme por favor
EliminarHola Betsy. Debes que llevar a tu cobaya al veterinario pues necesita tratamiento, puede que incluso le receten antibioticos.
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